Nueva tendencia del campo: canje de granos por propiedades en CABA o el AMBA
No hay dudas de que el sector inmobiliario y el agropecuario, dos de los motores económicos más importantes de Argentina, se han unido para ofrecer una modalidad innovadora de inversión en bienes raíces. A pesar de la reducción temporal de retenciones, los productores enfrentan un entorno complicado, donde los precios internacionales de productos clave como soja, maíz y trigo han caído, afectando gravemente sus márgenes de rentabilidad.
Un nuevo enfoque en inversiones
Dentro de este contexto, los productores agrícolas están planificando estrategias y buscando alternativas de inversión que permitan cuidar el valor de la producción. En este marco, ha surgido un mercado con potencial de crecimiento: el inmobiliario. Esta alternativa se ve impulsada por medidas del gobierno que han recuperado la confianza en el sector, como la derogación de la Ley de Alquileres y la eliminación del Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI).
Canje de granos como oportunidad
El uso de productos agrícolas como medio de pago es más común en economías agroexportadoras, pero en Argentina, esta metodología se está expandiendo al mercado inmobiliario. Alex Sakkal, cofundador de Grupo Nómada, la primera desarrolladora en aceptar granos para la compra de inmuebles en CABA y el AMBA, explica que esta práctica puede convertirse en un modelo exitoso.
Los productores interesados en adquirir una unidad pueden entregar granos como forma de pago. A través de la herramienta Click Granos, los productores financian la compra de desarrollos inmobiliarios utilizando sus granos disponibles o futuros como forma de pago, lo que les permite financiarse en cuotas y adaptar el negocio al flujo de su producción.
Beneficios del canje de granos
La operación se realiza a valores de mercado al momento de la transacción, garantizando transparencia y equidad para ambas partes. Un aspecto clave es que el canje de granos por unidades residenciales ofrece beneficios fiscales, ya que no se considera una venta directa, lo que permite evitar la retención impositiva al liquidar los granos.
Sakkal destaca que el mercado inmobiliario se está consolidando como una opción de resguardo de valor ante la volatilidad de otras inversiones. Además, esta herramienta permite a los productores convertir su cosecha en activos de largo plazo, beneficiándose de la apreciación del metro cuadrado.
Conclusiones
Con esta alianza, el objetivo es facilitar el acceso al mercado inmobiliario para el sector agropecuario y promover un modelo de inversión sostenible que fortalezca la diversificación patrimonial de los productores. En un contexto de márgenes ajustados y cambios regulatorios, convertir la producción en activos inmobiliarios se posiciona como una estrategia eficiente para capitalizar el esfuerzo del campo argentino.
